miércoles, 23 de junio de 2010

Natalia Muñoz


Sí, parece mentira. Hoy, y dentro de cuatro días, hace un año que conocí a una niña, que bueno, las palabras sobran.
Todo empezó en el aeropuerto : Ala, tu también vienes! Sí! Luego estábamos sentadas y probaste las maravillosas croquetas de mi abuela. Luego, fuiste tú la última a la que recogieron cuando estaban repartiéndonos por las familias, como bien dijiste. Y, como vivíamos cerca, quedábamos a las 8 y cuarto en el cruce para ir después juntas al colegio. Aún me acuerdo de cuando salíamos de donde hicimos la prueba y pusiste la música de Dire Straits, y el profesor te dijo, Que no pongas música que en el colegio no se puede llevar música. La cagamos ese día, y, para variar, nos tocó en el mini bus solas. Luego resultó que nos había tocado en la misma clase, y ya fue ahí donde empezó todo. Los primeros días no estábamos sentadas juntas, pero pasaron los días y nos juntamos. En un principio, ni siquiera había confianza, pero empezamos a hablar. Las clases de Jenna jugando al stop, diciendo cosa: con la P! PUTA! con la m! MOCO! y ya fuiste mi moquete. Mi moquete, mi precioso moquete. Luego me pediste los cascos, y nos hicimos nuestra primera principal. Y claro, mis cascos te enamoraron y te los pusiste y te los pedí, y de ahí salió nuestro amado NAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! y así sucesivamente, todos los momentos de Inglaterra, que fueron únicos, qué decir de las clases y de : JENNA, DON'T DO THAT! eh? yo no hablo español! Sho hablo argentíiiiino. Y los mentos, nuestro muy querido poundland (hasta que quitaron las minioreo por dos pound..) nuestro CLAIRE'S. Nuestros descuentos, nuestras zapatillas, nuestro londres, bath, millones de principales, nuestros ESPARTA.. Y ya nuestras conversaciones a las 12:00 cuando yo tenía llamadas gratis.. nuestra amada BLACK LIST, en la que aparecían una serie de porros los cuales no vamos a nombrar.. Y el reloj de mi pueblo, nuestros mensajes, "yo te Requiero, pero no de requerir, de quererte mucho. " Nuestras payasadas, nuestros : Vete del país, pero qué paliza, pero tú? a qué aspiras?, Dale gordita, dale que sí! tu quieres morir o algo así? VAMONOS ATOMOS! porque hay que quemar fenton road, porque Konrad(L), nata he perdido los deberes. pagina 86 ejercicio 9 MIRA QUE ERES DESPISTADA. NATALIA RETRASADA QUE HE PERDIDO LA CARPETA CON TODO!. Cacho peo! Sos relinda! Pero que cojones si es puta. Y A MI NO ME DAS UN BESO? :O. Tengo que levantarme a las 5 y media de la mañana. (5 segundos) QUÉ DOLOOOOOOOR!, si eres puntual, RECALCO, si eres puntual. Yo discrepo. I differ. Tía, indaga! T'stimo molto (natalia deja de inventarte idiomas..) mi perro se ha comido los deberes. Y NUNCA, BAJO NINGÚN CONCEPTO, MIREÍS ATRÁS! Telepizza. PEDO PINTOR.
Luego en Madrid, cuando nos vimos, nuestro mítico achuchón precioso que casi nos ahogamos, qué ganas de verte Nata, que ganas.
Y todos los momentos en Madrid, nuestros piques.. TODO.

Cuantas cosas que recordarte Nata. Cuantas cosas que recordar juntas. Cuantos momentos en tan solo un año. Y lo mejor? Cuanta amistad. Gracias por este año contigo, la verdad, ¿quién nos iba a decir a ti y a mí que íbamos a terminar siendo poshos? Mi niña, que me cumple hoy 16 años, y, el primer cumpleaños juntas, pero para nada el último. Eso ya lo sabes.

Gracias por todo Natalia, eres.. increíble. Y lo sabes, eres única, y nadie puede quitarte eso. Nadie puede quitarte a este posho pesadito que no se va a ir jamás de tu lado, y espero que tú tampoco te vallas nunca. Te necesito y lo sabes.

FELICIDADES, te quiero muchísimo :)

martes, 22 de junio de 2010

domingo, 13 de junio de 2010

Daniel

Sí, es posible.
Verte sonreír, mirarme. Mirarte. Sentir que algo me recorre de pies a cabeza cuando me tocas. Acariciar tu espalda, sentirte cerca, mío, susurrarte miles de cosas al oído.
Abrazarte con fuerza y sentir que estas ahí. Perderme contigo en cualquier lugar, lejos de todo lo que se nos pueda interponer.

Me encanta besarte, morderte, acariciar cada centímetro de tu piel. Me encanta tu olor, que después se queda conmigo. Que me mires a los ojos.
Cada pequeño momento, cada pequeña pero gran dosis de felicidad. Y de pronto, ser feliz. Ser feliz de verdad, contigo. Sin preocuparse por otra cosa más que tu seas tan feliz como yo.
El cielo como límite alcanzado, y quererte como única ilusión.

Te juro que todavía no sé como lo haces. Como has echo en tan poco tiempo que esto se complete. Y es que esto ya es tuyo, ya solo te puedo pedir que lo cuides. Que nada más me importa que vivir esto, este presente y el próximo futuro.

No quiero tenerte tan lejos como vas a estar, quiero tenerte aquí, ahora y en todos los lugares posibles. Sin nada más que nosotros mismos.

De todo aquello a lo que intentamos poner nombre, tratamos de ordenar y tratamos de entender. No, en realidad no es necesario entender nada.Limitarnos a querernos, a entendernos y a todo aquello que tenga que ver con nuestra nube de felicidad.
¿Qué por qué te quiero? No lo sé, ni lo voy a saber nunca, pero sabes? Tampoco me preocupa en absoluto. Tú y yo, y el resto qué más nos da.
Te quiero porque eres todo lo que nunca he imaginado que podría tener, porque eres increíble, y porque simplemente te necesito. Necesito tenerte cerca, hablarte, comerte, besarte, quererte, tocarte. Te necesito Dani, no sabes hasta que punto.



domingo, 6 de junio de 2010

56

Es posible, si que lo es. Y lo mejor es que esta ahí.
Sentimientos que crecen continuamente, cada vez más. Sí, puede que te esté empezando a querer mucho. ¿Y? ¿Cuál es el problema? Soy feliz. Muy feliz. Muchísimo.
Me encanta estar contigo. Me encanta que me beses, que me mires a los ojos. Que me digas todo lo que me dices. Me encanta que me acaricies, que me susurres cosas al oído, que me muerdas. Darte la mano. Querernos, ducharnos. Que me abraces, que te pongas de morros, que me sonrías. Quedarnos muertos mirándonos, hablando. Solos, sin preocupaciones, en un mundo que nadie puede ni siquiera rozar. Lo hemos alcanzado, sí. Y nadie, excepto el tiempo nos molesta. Confianza que cada día se hace más grande. Tú que me sonríes, que me haces reír. Tú me haces grande.
Tú que me das todo lo que no me han dado.
Y Perdernos. Y quererte Dani, quererte mucho.

Sí, estamos en el cielo